Hoy he recordado lo mucho que me gustaba mi trabajo antes que el hideputa me empezara a hacer la vida imposible.
Dinámico. Poco tiempo «libre». Muuuuucho teléfono. Muuuuuucha mano izquierda. Trato con clientes, trato con proveedores, trato con personal, trato con jefes, trato con no tan jefes. Coordinación para lograr el resultado óptimo que muchas veces se queda en intento por mil y un imprevistos… Por nevadas, por accidentes, por mil cosas toda una planificación de semanas, incluso de meses puede quedar en un rato chafada y hay que improvisar haciendo encaje de bolillos…
Sí, señor. Me encanta mi curro.
También he estado pensando en qué me llevó a mí al mundo del transporte…
Cuando acabé el postgrado en Calidad, mi objetivo era trabajar en un departamento de calidad de una empresa turística o en una consultora.
Descartado el tema consultora (no iba a trabajar gratis de becaria durante no sé cuánto tiempo), y descartado también el tema empresa turística (a mediados de los 90, en plena crisis, el sector no estaba muy por la labor de gastarse los cuartos en la Q), fijé el objetivo en el departamento de calidad de una empresa de servicios. Cualquier servicio es intangible y da lo mismo que sea un viaje en avión o en camión….
Así, mandé unos cuantos currículums y el mismo día que me llamaban del INEM para hacer una entrevista en una agencia de viajes, dí el sí a la empresa que me vio crecer, UPS.
Ese día, como se ha visto después, cambié el turismo por el transporte.
Como el día que dejé el «cómodo» departamento de atención al cliente para ir al «operativo» departamento de tráfico. Mil veces renegué (más por el hideputa que por el trabajo en sí) y otras mil salí adelante con tesón y con dos ovarios.
Hoy, en una empresa mucho más pequeña, familiar casi, con un equipo que me apoya y que está dispuesto a entrenarme en «sus» costumbres, he vuelto a mi ser. Sí que me gusta mi trabajo…
Pese al cutrehorario (cutre pero que requetecutre), tengo gusanillo de más…
No siempre puedo conectarme a Internet, así que suelo llegar tarde a las novedades.
Me alegro de tu trabajo y me alegro, especialmente, de que te guste. Por el post siguiente me entero del problema número 1 en estos casos: la enfermedad de los peques. Ahí no te puedo dar consejos: muy a pesar mío no tuve hijos. Pero desde la perspectiva de alguien que aguantó 32 años un trabajo que no le gustaba, sin poder ejercer aquel para el que se formó y estudió un huevo de años, te digo que es un lujo trabajar en algo que te guste. Con los hijos y la no existencia real de conciliación laboral en este país, te costará más pero lo harás igualmente. Suerte, un abrazo y que mejore la peque
Pues disfruta lo que puedas, estar en un trabajo que te deje mínimamente satisfecho, ya es un triunfo. Yo ha mucho que me aburrí de que no se tuviera en cuenta la calidad de mi trabajo, que con legítimo orgullo aafirmo que es mucha, y sí mi mucha capacidad reividincativa, reconozco ser una mosca cojonera. Insisto disfruta lo que puedas y no te pases currando
Hacienda también era, mona, que nadie me eximió de pagar religiosamente mis impuestos durante este tiempo…
Bienvenida al mundo laboral!!!!
Mucho se queja Ud. del horario, peroooo…tan cutre es?? que mira que no es por chinchar pero cutres son la mayoria (mio incluido) y a tó se apaña una (que remedio).
Ademas, ya eres de nuevo mami trabajadora!!! corre, corre ve a hacienda-somos-todos jajajajaj
Besos miles!
Felicidades!!!! y bienvenida al mundo del trabajo.
Yo siempre he tenido un horario cutre y a veces me ha costado mucho compaginarlo con la familia, pero con la ayuda de mi costi, que siempre ha estado ahí en todo, lo hemos conseguido.
Mucha suerte y muchos besos!!!!
¡Fuerte con los 22!
Besos 😉
A mi también me gusta mi trabajo, y creeme, es un privilegio.
Me alegro, siempre un nuevo trabajo es una nueva aventura y nunca se sabe. Me alegro que te guste.
Salud y República
Ole mi niña.
Algo tiene el trabajo que cuando lo tienes no dejas de renegar de él pero cuando te falta te sientes vacío/a.
Lo que me tiene intrigado es el cutrehorario ¿Se puede saber qué tipo de jornada te han colocado?
Saludos. Lo peor ya ha pasado.
¡GUAPA!