Acabo de ver una noticia en el telediario que me ha dejado helada.
Polonia está preparando una ley para perseguir a los gays.
Estoy casi sin palabras. En pleno siglo XXI, en el seno de la UE… ¿un país se desmarca con leyes anti-derechos civiles?
¿Qué pretende el Gobierno, que la gente emigre?
Polonia es un país como dios manda en el sentido literal de la palabra.
Esto se veía venir desde que ganaron las elecciones esos Zipi y Zape ultraderechistas, que por otra parte era previsible en un país ultra como Polonia. Estoy de acuerdo en que la UE no debería tener la manga tan ancha. Y si ahora consuman esta barbaridad debería expulsarlos. Pero la UE no es otra cosa que un gran zoco y son las consideraciones mercantiles las que priman por encima de cualquier otra. Porque, ¿cuál es el criterio para llevar tanto tiempo esperando por Turquía? ¿Es un país europeo siguiera geográficamente? ¿Qué es la Unión Europea? Pero por Dios, si no hay forma ni de tener una política exterior mínimamente presentable e independiente del vaquero texano. Lo dicho, la UE es el juguete de un puñado de mercachifles que nos adornan la descarnada realidad para que no sea tan evidente que el emperador va desnudo, que es lo que pocos se atreven a decir.
¿Estaba España en el 86 como lo están ahora Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía, Bulgaria?
Yo creo que no.
Lo que pasa es que la UE no tiene el más mínimo criterio para admitir como socios a países de pandereta (si, ya la hemos exportado allende el continente).
Que un país gobernado por Pili y Mili, que se parece más al país de Liliput que a otra cosa, sea parte de la Unión Europea, sin que ésta ponga sus exigencias en cuanto a simples y comunes derechos civiles, que no obligue a los estados miembros a respetar a todos los ciudadanos que habitan en su suelo… me parece demencial.
A Turquía no la dejan entrar, con mucha razón porque no cumple los mínimos requisitos de un estado democrático, pero Polonia no le va a la zaga.
Espero que se tomen cartas en el asunto y se ponga a «los gemelos del norte» en el lugar del que no debieron salir.
Porque si no, puede que algún país con sensibilidad empiece a cuestionarse empezar a sufragar una «dictadura de opereta» como la que quieren implantar en ese pobre país, tan duramente castigado a lo largo de su historia por histriones con poder. ¡Y encima, tutelados por las normas de la sacrosanta iglesia católica! ¡Es que hay que joderse!.