Hace unos días, a colación de la polémica por el uso indiscriminado del crucifijo para las tomas de posesión de l@s nuev@s ministr@s, recordaba una anécdota que me contaron hace un tiempo.
Una política socialista, nada más llegar a su cargo, mandó tres o cuatro vírgenes a restaurar… y nunca más aparecieron…
No hubo aspavientos por parte de nadie… las cosas bien hechas, bien parecen…
Espero que el PNV no haga lo mismo, pues no es la misma cosa…
ETA EZ – ETA NO no es un mensaje negativo, más que para quien va dirigido… Me gusta también QUEREMOS LA PAZ, pero las cosas conviene que se llamen por su nombre… no sé si me explico…
Igual era muy devoto y estan en su pueblo… o igual estan en su lugar origiinal, o las vendiio y con el dinero hizo «obras de caridad».-