El vídeo viral de la BBC

Ni recuerdo a quién le vi el vídeo el pasado viernes pero estuve un buen rato riéndome. Es más, tuve un momento de esos de retroalimentación en los que no puedes parar de reír y casi estás con lágrimas. Yo trabajo en mi casa y hago muchas videoconferencias y, si bien mis hijos son algo más mayores que los de Robert E. Kelly, también han entrado a gritos en mi despacho mientras yo estaba en plena faena. También es verdad que no me estaba entrevistando la BBC, pero de haberlo hecho, les habría tratado de tapar con una mano mientras cerraba los ojos suplicando al infinito que les hiciera desaparecer y evitaba un ataque de risa a la vez. Seguro que mi chico habría entrado en la habitación reptando y se los habría llevado a rastras.

Es que es todo genial: la hija bailando, el hijo con el tacataca, la chica que entra derrapando, que pilla a la niña y la saca literalmente volando mientras se le caen los libros de la mesa (con el consiguiente estropicio), el tacataca que, por supuesto, en sentido inverso no cabe por la puerta, la mano que aparece arrastrándose desde el suelo para cerrar, por fin, la puerta… y los llantos que se siguen escuchando durante el resto de la entrevista. Delirante. La pesadilla de todo padre (o madre) que trabaja desde el despacho de su casa hecho realidad.

Dicho lo cual, yo no veo ni machismo, ni que el hombre sea un borde, ni un mal padre, ni que la que aparece corriendo (que me da igual que sea chica, cuidadora, madre o una que pasaba por allí) sea sumisa o esté aterrorizada (flipo con esto, pero flipo flipo). Veo que un pavo que está en el despacho de su casa haciendo un directo con la BBC (¡¡¡LA BBC!!!!!) tiene un incidente que le puede pasar a cualquiera y es todo tan cómico que es una genialidad. Me recuerda muchísimo a la escena de La Vida de Brian, cuando el soldado romano tiene que aguantarse la risa con el ceceo de Pijus Magníficus.

Sacamos las cosas tantísimo de quicio que es increíble.

Y hoy ha aparecido este gif, que es maravilloso.