Parece mentira que, en el globalizado, vitaminado, supermineralizado y liberalizado mundo en que vivimos, los adalides de esta liberalización no se crean una sola palabra de lo que pregonan y sigan tratando de vendernos la moto.
¿Se cree de verdad en la economía de mercado? Si es así, cuando un banco quiebra, por el motivo que sea, supongo que se debería tratar con la misma ley que se trata al resto: oferta y demanda.
Pero no es así. Asustados por las consecuencias, catastróficas no sólo para ese banco y sus clientes, sino para la economía globalizada en su conjunto, los gobiernos deciden intervenir… sin éxito garantizado, por cierto.
¿Cómo es posible que el sistema económico mundial sea tan absolutamente frágil?
Unos señores juegan a la lotería con inversiones de alto riesgo en EEUU y en Europa nos cogemos un constipado -de momento.
Como la bolsa, una empresa ES o NO ES según lo que los inversores estén dispuestos a pagar por el valor de sus acciones.
Nada es real.