Estos días hemos estado por Matrix … Hoy teníamos revisión con Tomás en el cardiólogo … y de paso, con Lara, que le querían echar un vistacín .. no fuera a ser que los genes cabrones le hubieran también jugado a ella una mala pasada …
Afortunadamente, ella está bien. Así que siguiente revisión, control en dos años … Olé por ella!
Tomás está igual, lo que en su caso, equivale a excelentes noticias … Incluso tiene un pelín menos de gradiente (pero bueno, éste sube y baja) …
Lo que quiero contar, es más bien la experiencia hospitalaria por la que me veo obligada a pasar cada tres meses .. que es muyyyyyyyyyy fuerrrrrrrrrrteeeeeee!!!!!
Hospital Ramón y Cajal, Matrix. Hospital construído en 1977, que consta de 12 pisos + bajo y 2 sótanos. Tres alas: izquierda, centro y derecha. Accesos innobles: M-30 en permanente construcción, horario de ataJJco total y parking diminuto hecho a la medida de la automoción de los 70.
Primero, nos citan en la consulta (planta +3 izq) … a las 9. Solemos llegar antes (no más tarde de las 8.30) porque te atienden por orden de llegada, vamos, que citan a todo el mundo a la misma hora ………… Allí entregamos informe y nos dan los volantes y las pegatinas identificativas. (Aunque hasta ahora, teníamos que llevarles pegatinas nosotros que previamente habíamos tenido que conseguir en Secretaría, si es que la secretaria se dignaba a estar a su hora en la oficina o bien en admisión o sissy-the-last … así que hoy, nos pateamos medio hospital para no conseguir pegatinas … y luego, cuando le dije a la secretaria «anda que os cunde … ¿no se os podía haber ocurrido esta BRILLANTE idea antes?»se ríe, la tía petarda …)
Como hoy íbamos con dos niños, la cosa se complicaba un poquitín … A Lara le mandaron RX (planta 0-centro) y electrocardiograma (planta +3izq)… y a Tomás, electro y ecocardiografía (+2izq). Marido se va con la niña a rayos … mientras mi madrina y yo, nos vamos con el niño al electro.
Como Tomás se quejó cuando le ponían los electrodos, en vez de dejarme la enfermera tranquilizarle un poquito … va la tía, le unta el chupete en sacarina y se lo embute en la boca. Y al pobre le dio una arcada gigante … llora que te lloraré … en fin …
Salimos y nos quedamos esperando a marido y Lara que venían de la placa. Le hacen a ella el electro y nos vamos a la consulta a entregar la placa y los electros y le digo a la secretaria que nos vamos a la eco, que es una planta más abajo.
Esperamos laaaaaaarrrrrgo tiempo porque los ascensores SIEMPRE suben y bajan llenos y al fin pudimos tomar uno. Es un piso miserable, pero con una silla de niño (con dos niños) pues como que andando va a ser que no …
Finalmente llegamos, entregamos el volante de Tomás (Lara era susceptible de hacerse, pero a criterio de la cardióloga en consulta, que siempre es posterior a las pruebas) y esperamos que nos avisaran …
De pronto, aparece la secretaria y me apunta «amablemente»: «Te dije que tenías que pasar por la consulta antes del eco» ??????????????? En fin, como ya estaban para llamar a Tomás, me fui con Lara a la consulta y pasamos inmediatamente. Placa normal, electro normal, pero aún así, nos mandó una eco y nos dio volante…
Vuelvo con la nena a la planta de abajo, llamo suavemente con el nudillo a la puerta para entregar el volante y me sale un auténtico CABALLO PERCHERÓN disfrazada de cardióloga-ecógrafa-sesentañera. Le doy el volante y le digo, soy Fulanita, la mamá de Tomás (¿Quién es Tomás? jaja Y yo … pues el niño al que están ahora mismo haciendo la eco). Vengo de consulta y me manda la Dra Sánchez para hacerle también un eco a la niña. Y me dice … ¿Y cómo no me llama la Dra Sánchez? … Debí poner tal cara … (de aluflipación, claro), que entra para dentro y se pone a gritar … «Es que ya NADIE tiene educación: ni los médicos, ni los pacientes» …
Si en ese momento tengo un guante de boxeo, probablemente la hubiera knockeado por hijaputa.
¿Sin educación? Pero quién se cree que es?????? Al servicio de quién trabaja????? Me porté yo ineducadamente???? Bastante drama tengo con tener que verle la cara cada tres meses …
Salen mi marido y el niño de la sala (marido flipando con la tronca en cuestión, claro … porque él estaba dentro oyéndolo todo) e inmediatamente sale el Dr que le estaba haciendo el eco al niño para hacérselo a la niña en otra sala contigua. Todo bien. Y cuando ya estaba todo terminado y yo vistiendo a la pitu, aparece SHREK y se pone tipo energúmena a decir (no directamente al Dr Cazalillas, si no al aire) que el material hay que cuidarlo y que bla bla bla …
Y yo pensando, mira, anda, por lo menos, no sólo es hijaputa con los pacientes, también con sus propios compañeros ….
Inmediatamente fuimos a la consulta y nos atendieron enseguida. Resultado el que ya apunté arriba …
Las preguntas de hoy … ya que me veo obligada a aguantar a tipas como ésta (y otros peores, como el Jefe de Servicio, el Dr. Casanova, con el que en otra ocasión tuve unas palabras … voy a resumirlas, no me puedo contener …
A Tomás le subió el gradiente entre los meses de septiembre y enero del año pasado, pasando de 30 a 80. En noviembre habíamos tenido revisión y el grad era de 50. Sin embargo, entre medias, en diciembre y a raíz de una bronquiolitis, la cosa empeoró y subió tanto que el niño empezó a precisar medicación.
Pues este señor, nos envía a finales de enero, el informe de la consulta de finales de noviembre (doy por hecho, que a pesar de la demora, han tenido a bien leer toda la historia del niño en el hospital, puesto que el ingreso por la bronquiolitis fue allí). En cualquier caso … el informe decía que NO precisaba medicación.
Cuando lo leí, le mandé un correo electrónico, para asegurarme, puesto que después del ingreso, al alta, habíamos salido del hospital con medicación «crónica» y a mi me extrañaba que se la quitaran en unas semanas ….
Me contesta de mala gana y manera que si el informe dice que no, es que no precisa …
A la semana, teníamos que volver al hospital para unas pruebas de alergia, así que ya que estaba allí, pasé por cardiopediatría para volver a preguntar (quizá más a los doctores que le habían tratado en planta) … y me encuentra este FULANO en el pasillo y me dice: SEÑORA ES USTED UNA PESADA. Ya le dije el otro día que bla bla bla … Y yo, flipando!!!! Pero mi problema es que en frío me trabo, así que con ojos como platos, repliqué … pero verá, es que el niño estuvo ingresado y el gradiente es de 80. Y ya me dice … a ver el informe … se lo enseño e inmediatamente me dice … SEÑORA, MENOS MAL QUE HA VENIDO USTED. Será hijoputa? Por qué no pregunta antes de disparar? Por supuesto, al niño no sólo no le quitaron la medicación, si no que se la duplicaron.
Contada la anécdota ……
Tendría que haber ido a quejarme a Atención al Paciente?
Redacto una carta y se la mando? O un anónimo? je je
Le llamo cabrona a la cara la próxima vez? (que pasará en abril)
Por qué hay este tipo de gentuza a cargo de la salud de mi hijo?
Se acordarán de quién era Hipócrates?
AMEN
Pli, lo de María Ostiz m’ha matao … un pueblo esss un pueblo esssss … me pongo coletas??
Ay, que paciencia hay que tener! Yo, como Jorge, estoy haciendome mayor porque todos los dias tengo alguna cruzada por aqui… y eso que HK es mas suave que España porque son bastante mas formales. La formalidad en el trato ayuda, cuando empezamos a tutear y a tratar al cliente como al vecino de abajo, es cuando se empieza a perder el norte… Prima! Tu, ahi, en tu sitio, haciendo lo que tienes que hacer. Y los medicos esos que gritan y estan amargados, sera porque son infelices y tienen una vida que no les gusta. La proxima vez, llevate una guitarra al hospital y cantale al medico tipo Maria Ostiz a ver si es verdad lo de que la musica amansa a las fieras…
¿Y te has parado a pensar en la solución que me repiten en casa cuando pasan estas cosas e incluso otras peores?
La recortada y el tiro en las rodillas, para que sepan esos trabajadores de la salud lo que es el dolor.
Mami
Lo que hay, efectivamente, es mucho hijo de puta, ya sea en Sanidad o vendiendo clavos, en lo público o en lo privado. Y yo debo de estar haciéndome mayor, porque cada vez tengo menos aguante con estas cosas. ¡Menuda paciencia tienes!
Yo también me quedo con las buenas noticias médicas. Un abrazo.
Ya ya … pero del mismo modo que hay excelentes médicos, también los hay mediocres eh? … si al menos alguno fuera el Dr Macizo …
La parte buena es que en la Seguridad Social española hay muy buenos profesionales, por lo que, en el fondo, Tomás estará bien atendido.
La parte mala es el riesgo que corres de acabar un día arrasando medio hospital con una recortada, en plan «Un día de furia».
C’est la vie, que dicen los vecinos.
(Enhorabuena por lo de Lara ;-))