Este es un tema recurrente (y volveré sobre él en los próximos días).
Asociaciones de padres piden que se adelante la vuelta al cole … o lo que es lo mismo: en vez de marear la perdiz durante el mes de septiembre, iniciar las actividades escolares a principios de mes.
Sabiendo además que chocarán frontalmente con el profesorado (que no descansa suficientemente, claro), piden que aunque no haya clases en sí, que se organicen otro tipo de actividades).
Las vacaciones escolares van de junio (día indeterminado, aunque ya suele ser un mes de ir medio día al cole) a septiembre (también día indeterminado … y también con medias tintas).
A mí que me expliquen cómo puede hacer una familia en la que los dos padres trabajan y sin abuelos, tíos, primos o posibilidades de contratar a alguien para asumir las vacaciones de sus retoños…
Porque, al fin y al cabo, sólo un colectivo, el de profesores, se vería «perjudicado» con una medida así … y sin embargo, sería algo muy importante para las familias. Entrecomillo lo de perjudicado porque el dinero ohhhh todo lo puede…
De acuerdo en casi todo, pero no creo que deban ser los profesores los que carguen con esas «actividades no académicas» para permitir trabajar a los padres, sino monitores o gente preparada para ello. Yo no me metí en esto para llevar a los niños al parque o hacer de «babysitter», para eso no se necesita una carrera universitaria.
Besotes!
Ruth, tus comentarios son más que bienvenidos … y te aseguro que en los próximos días me serán de muchísisisisima utilidad para entender ese fabuloso mes de septiembre con adaptación sin fin jeje
No sé si soy una madre al uso o no … trato de leer mucho, para saber cómo actuar en muchas situaciones con mis hijos, he asistido a escuela de padres (y espero seguir haciéndolo). Aún así, hay cosas que se me siguen escapando … supongo, que afortunadamente.
No te quito la razón en que muchos niños son unos verdaderos cafres (igualito que sus progenitores). Yo no pido que los niños tengan escuela (clase clase) 11 meses al año, pero evidentemente, hace falta una solución, porque, lamentablemente, en la empresa privada eres afortunado si tienes 30 días de vacaciones … y los datos no cuadran…
Antes, las mamás no trabajaban (tampoco hacía falta) y cuidaban a los niños. Ahora, con la incorporación de la mujer a la vida laboral, hay problemas que la sociedad (como sociedad) no ha resuelto y uno de ellos es la archifamosa conciliación.
Si no tienes hijos porque no puedes conciliar o porque lo tienes complicado, si no tienes hijos porque no tienes familia cerca, si no tienes hijos porque te ahoga la hipoteca … entonces sólo tendrían hijos los ricos …
Besotes!
Ay, Maripuchi, Maripuchi… Llevo poco tiempo leyendo tu blog, pero por lo que veo vamos a estar de acuerdo en el 99% de los asuntos que tratas. Me vas a permitir, por tanto, que hoy haga una defensa a ultranza de mi profesión y luego no vuelva a tocar el tema y alabe todas tus palabras en cualquier otro post. Ni yo te voy a convencer a ti ni tú a mí, pero si no lo escribo reviento. Disculpa que me desahogue contigo (eres más que bienvenida a hacerlo tú en mi blog).
Te voy a explicar las razones que yo veo para que los profesores de primaria tengan dos meses de vacaciones en verano (son dos, no dos y medio, ni tres, como dice mucha gente; los niños salen una semana antes de terminar junio -sí, una, no veinte días, ni quince- y vuelven tras la primera semana del mes de septiembre, pero los profes estamos ahí hasta el treinta y desde el uno).
Primero, me ofende sobremanera que me compares el estrés que puede tener una cajera -no hablo de médicos, aunque, como sean de cabecera, mucho dolor de estómago no creo que tengan- con el que tiene un profesor de primaria, y las cifras de depresiones me avalan. Cuando una cajera, un contable, un oficinista, etc., sale de su trabajo, desconecta. Nosotros no. Yo llego a casa pensando en cómo puedo hacerles entender mejor el tema, por qué Fulanito y Menganito se llevan tan mal, qué hacer con la pobre niña que está marginada, si debo denunciar a la madre que ha tenido al niño en la calle más de cuatro horas en invierno, cómo suplementar el tema de sociales y dónde encontrar material… Horas libres, sin paga, que nadie me pide que meta pero que en conciencia no puedo no meter.
El año pasado hice una sustitución de tan solo un mes en una clase especialmente conflictiva; salía de clase y me pasaba horas en la biblioteca y en Internet buscando materiales para mejorar la dinámica de clase. Tenía pesadillas con los niños, estaba agotada física y mentalmente (alguno dirá que soy una exagerada, pero intenta evitar que un niño de nueve años muerda a otro mientras otros tres se pegan a tu espalda, o dar una clase con cuatro bestias cantando a voz en grito que se escapan de la oficina del director y se salen del colegio), no podía con mi alma. Adelgacé cuatro kilos, ¡y sólo estuve un mes! Huelga decir que el profesor titular se ha jubilado este año.
Tenemos dos meses de vacaciones porque es la única manera de recargar pilas y no llegar al colegio con la recortada y empezar a disparar al primero que se mueva de la silla, o al primer padre o madre que te grite por haber suspendido a su hijo. Los niños tienen dos meses porque durante el curso están sobresaturados; son niños, no lo olvidemos, y su organismo les pide correr y saltar, no estar sentados oyendo la chapa que tiene que soltar la pesada de turno. Y después del cole toca inglés, y luego música, y luego los deberes… Y cuando llegan a casa, cenan y se meten en la cama, y los padres (no quiero generalizar, pero muchos son así) ni siquiera recuerdan que tienen hijos o hijas.
No voy a comentar siquiera lo de los once meses de clase, simplemente va contra natura. Como la propuesta de abrir los colegios los sábados o ampliar el horario escolar hasta las nueve de la noche (¡lo que hay que oír por tener orejas!). Para algunos padres, tener hijos parece más una condena que una bendición, y nos han convertido en carceleros. Yo no estudié para eso, estudié para impartir conocimientos. Bastante tengo con ser psicóloga, pedagoga y hasta madre en muchos casos.
Siento que te veas en la situación en la que te ves, Maripuchi, pero creo que el calendario escolar no te pillaba de sorpresa cuando tuviste a tus hijos, no ha cambiado en muchas décadas. Ya sé que la sociedad avanza y los tiempos cambian, pero no creo que tratar a los niños como si fueran a trabajar a la Michelín sea la solución. Habrá que buscar otras, pero ampliar los meses de colegio, no.
Hala, ponedme a parir, que estoy descansada después de mis dos meses de vacaciones y ahora sólo trabajo de mañana, me lo tomaré con deportividad y mucho humor. Pero en mayo que nadie me tosa, ¿eh? Que entonces me pongo a suspender a todo el mundo y ninguno me pasa a la ESO.
Repito, Paco, que los adolescentes no suponen un problema para conciliar la vida laboral con la familiar.
Y con los niños más pequeños, no creo que sea TAN IMPERIOSO un descanso de tres meses. Sinceramente.
Se me olvidaba… Estoy de acuerdo al 100 % con el hermano montgolfier. Por la salud mental de los adolescentes y de los profesores el descanso de dar clase, que no de trabajar, es necesario.
El tema es más complicado de lo que parece, al menos en secundaria que es donde yo trabajo. Resulta humanamente imposible empezar el curso a primeros de septiembre. Tenemos que preparar horarios de profesores, de alumnos, y no te puedes imaginar el trabajo que eso lleva. Primero hay que hacer los exámenes de septiembre, matricular a los alumnos, hacer los grupos con las optativas, …. paro ya que es lo que me toca el lunes y me da el síndrome…
El problema es como siempre de dinero. No se trata de quitar vacaciones a los maestros, que las tienen más que ganadas, sino de contratar gente para julio y septiembre que haga actividades distintas y educativas con los niños. En fin, un tema muy complicado.
Yo no solo lo adelantaria como solución para cuando los dos padres trabajan.
Yo no trabajo fuera pero veo que los niños se pierden con tanta «vacación» y tanto descanso.
En casa se aburren no puedes estar constantemente encima de ellos y tiran a lo facil, holgazanear o viciarse con la Play Station o la tele.
Es muy bonito proponer salidas, piscina, excursiones, pero no se puede hacer eso los dos meses largos que se tiran…los padres tenemos mas tareas que hacer.
Como profesora que soy, aunque no ejerzo, SI, reconozco que es demasiado tiempo de descanso.
El gremio se queja de estres pero tambien lo tienen los médicos o las cajeras del super y no por eso estan tres meses de vacaciones.
Y te puedo asegurar Maripuchi que a esas edades tempranas como bien dices no creo que necesiten tanto tiempo para preparar la bibliografia ni esos complejos programas escolares para un niño de 4 o 6 años que llenan de florituras pedagógicas y sueltan a los padres en las reuniones ,la mayoria de las veces incomprensibles.
Besos.
Ay, Hermano, es que no creo que ningún padre se queje de que no puede conciliar porque tiene a un adolescente de vacaciones y no puede ir a trabajar ….
El problema no son los adolescentes … si no los niños … cuando tienen de 0 a ¿12?…
No me digas que tienen sus maestros que preparar mucha bibliografía, porque va a ser que no…
¿Estresados los niños? Plantéales un buen programa de actividades y verás qué bien se lo pasan …
En este tema tengo que discrepar, y por varias razones.
Primero porque siguo pensando que el descanso veraniego es necesario para la salud mental de los estudiantes (o infantes), no vayamos a crear estresados precoces, que bastante lo estamos ya los adultos. Tiempo tendran de estar puteados a lo largo de su vida.
Segundo (y ahi es donde me toca de cerca, ya que mi mujer es profesora de lengua en un instituto de secundaria), las vacaciones de un profesor van desde Julio hasta el 1 de Septiembre, en Junio y Septiembre, cuando no van los niños, los profesores deben estar preparando informes y memorias para la administración, examenes, horarios, temarios, listados de libros, y muuuchas tareas administrativas más. Debido a las vacaciones que tienen, ligeramente más que otro funcionario de la misma categoría, no tienen días de asuntos propios, y cobran ostensiblemente menos que cualquier otro funcionario con la misma categoría. Tienen que enfrentarse a veces con autenticos delincuentes en potencia sin tener un plus de peligrosidad, y además tienen la obligación de emular a Jesus, poner la otra mejilla, si a algún alumno (o padre) cafre les agrede o insulta.
Por último, particularmente mi mujer estuvo presentándose a oposiciones durante diez años hasta que aprobó, mientras se recorrió infinidad de pueblos de toda Andalucía haciendo sustituciones y cubriendo vacantes.
Por esto creo que tiene el puesto bien ganado, y dado que le gusta su trabajo y se lo curra día a día en el instituto y en la casa (donde se trae el trabajo a menudo), creo que tiene el puesto que se merece, y de además creo que debería cobrar más.
Disculpas por mi vehemencia y un saludo para todos.
Hola Oscar, guapísimo … sé que lo llevábamos en el programa … A ver si ahora, Patxi puede hacer algo, al menos con las Escuelas Infantiles, que son municipales…
Una de mis conversaciones «estrella» es acerca de la conciliación.
Lo sufro en mis carnes. Es sencillamente imposible conciliar: entre las vacaciones y los horarios …
En fin, trabajaremos en ellof.
Un besote.
Tan difícil es lograr la verdadera conciliación? Quizá alguien debería hacer un estudio sobre el aumento de sospechosas bajas laborales en septiembre de mamis y papis trabajadores. Si como dices no tienes quien te ayude… a ver cómo te las compones.
No sería mala. Ya hay muchas propuestas en ese sentido (nosotros llevábamos en el programa electoral la de que los centros escolares dieran servicio 11 meses al año).
Por otra parte, me parece que tienes un blog muy currado.
Saludos,
Óscar
http://www.blogs.ya.com/blog-oscar/